El Rosario, una corona de flores

Cuenta la tradición que había una vez un hermano de la orden de los dominicos que no sabía leer. Por esto, en vez de rezar los 150 salmos como lo hacían los demás hermanos, él todos los días se arrodillaba frente a la imagen de la Virgen María y rezaba 150 avemarías. Los demás miembros de la comunidad poco a poco se empezaron a dar cuenta que, aunque nadie se encargaba de poner flores para decorar la imagen de María, esta siempre irradiaba un olor a rosas.

Algún tiempo después el hermano cayó enfermo por lo cual no podía levantarse de su cama e ir a orar frente a la Virgen. Sus compañeros notaron que la imagen de la Virgen dejó de tener ese olor a rosas que tanto la caracterizaba. En sus últimos momentos de vida el hermano pidió ser llevado una vez más frente al altar de María para poder orar allí antes de morir.

"Cuando el hermano empezó a orar los compañeros observaron asombrados que por cada avemaría aparecía una rosa a los pies de la Virgen".

Cuando el hermano empezó a orar los compañeros observaron asombrados que por cada avemaría aparecía una rosa a los pies de la Virgen.

Es así que nace el Rosario, que significa Corona de rosas. Años más tarde Santo Domingo de Guzmán sería el encargado de divulgar y popularizar esta devoción mariana de meditar los misterios mientras se proclaman avemarías como una ofrenda de rosas a nuestra Madre María.

Con los años el Rosario fue tomando su forma actual de 5 grupos de 10 avemarías acompañados de un Padre Nuestro y un Gloria. Además fue ganando popularidad, especialmente tras la batalla de Lepanto el 7 de octubre de 1571. Ese día las fuerzas cristianas de la Liga Santa se enfrentaban a la marina otomana por el control del mediterráneo. Una derrota de las fuerzas cristianas hubiera significado una gran amenaza para el futuro del cristianismo; por eso el Papa Pio V, junto a miles de fieles romanos, recitaba el Rosario pidiendo por la intercesión de María en la batalla que se libraba.

Las fuerzas cristianas efectivamente ganaron la batalla deteniendo el avance otomano por el mediterráneo y asegurando así la preservación de la cristiandad; por esto se consagra ese día, 7 de octubre, como día de Nuestra Señora del Rosario.

En esta edición de toñito enfocada en las flores queremos invitarte a que ores el Rosario, arma poderosa contra el mal, y también ofrenda de flores a nuestra Madre.

"En esta edición de toñito enfocada en las flores queremos invitarte a que ores el Rosario, arma poderosa contra el mal, y también ofrenda de flores a nuestra Madre".